Los secretarios de deportes de las provincias patagónicas participaron de una reunión del EPADE -Ente patagónico Deportivo- y emitieron un documento dirigido al subsecretario de deportes de la Nación, Julio Garro, en el que formalizan la decisión de no participar de los juegos si el ejecutivo nacional no cubre el 100% de los gastos.
En los hechos el gobierno nacional había ofrecido un 20% de lo que requieren las provincias para gastos de traslado, comida y hospedaje.
«La región en cada uno de sus provincias, ya realiza una enorme inversión en la organización de las competencias locales, zonales y provinciales previas para la clasificación a los Juegos Nacionales Evita, en un contexto nacional complejo, así como también para los Juegos Binacionales de la Araucanía, que desarrollamos en conjunto con nuestro hermano país de Chile» dice la nota que lleva la firma de los titulares de las carteras deportivas de la patagonia.
Por su parte el subsecretario de deportes de la provincia de Buenos Aires, Leandro Lurati, respaldó en sus redes sociales la postura patagónica y manifestó que «Sin inversión estatal no hay juegos Evita».
La historia de los Juegos de Evita
Los juegos surgieron en 1948 como una herramienta de inclusión y promoción social. La idea fue impulsada por la propia Evita Perón y el ministro de salud, Ramón Carrillo. De esta manera, muchos niños y niñas podían acceder por primera vez a la práctica de un deporte y un chequeo médico. Ya en 1949 unos 100.000 niños participaron de la experiencia que fue pionera del deporte social en la región.
Las dictaduras -de 1955 y 1976- suspendieron los juegos que en 1974 habían visto nacer una de sus estrellas: Diego Armando Maradona, junto a «Los Cebollitas», sale campeón en el certamen luego de disputar una final en la ciudad de Córdoba.
Recién en 2008 los juegos se transforman en ley con el lanzamiento del Plan Nacional del Deporte. La motosierra de Javier Milei vuelve a poner en dudas la realización de este encuentro histórico cuyas finales serán en el mes de noviembre en Mar Del Plata.