La denuncia recae sobre el Ministro de Justicia pero también sobre la senadora de Juntos por el Cambio Carolina Losada. La denuncia es por encubrimiento agravado, torturas, tratos crueles, inhumanos y degradantes y violación de los deberes de funcionario público, luego de la jornada que promovieron en el salón azul del senado, el 20 de noviembre, bajo el título de «falsas denuncias».
El evento se llevó a cabo para impulsar el proyecto de Losada para modificar el código penal y agravar las penas para quienes realicen renuncias «fraudulentas» por violencia de género. Allí brindó su testimonio una joven de 18 años, cuyo padre está cumpliendo condena por el delito de abuso sexual gravemente ultrajante.
La joven leyó un texto visiblemente afectada, con su madre a un costado y la senadora Losada siguiendo con atención las palabras que supuestamente justificaban su proyecto. La justicia condenó al padre de la joven el año pasado, y la fiscala interviniente pidió que se investigue la responsabilidad de la madre en los hechos de abuso que tuvieron lugar cuando la víctima tenía entre seis y diez años.
La cuestión es que más alla del testimonio de la joven incriminándose por una denuncia falsa, las pericias realizadas por la justicia constataron no solamente los abusos, también el daño generado a la salud mental de la víctima.
La denuncia
La denuncia fue realizada por los integrantes de la Asociación de Altos Estudios en Violencias y Abusos Sexuales y lleva la firma de Carlos Rozanski, Bettina Calvi y Natalia Amatiello.
«La senadora Losada, en connivencia con el ministro Cúneo Libarona, llevaron a la joven a que leyera como si fueran dichos propios, un texto ficcional, ajeno a su voluntad acreditada en el juicio, que le entregaron ya confeccionado los sindicados por esta denuncia y valiéndose de sus cargos institucionales», señalan los denunciantes.
En diálogo con AM530, Carlos Rozanski aseguró que lo sucedido en el senado «es parte de la campaña que hay para grabar con penas las denuncias en contra de los pedófilos» y que pusieron a la adolescente «en un enorme grado de peligro porque la sentencia comprobó por pericias que tenia un grave daño su salud mental. La llevan al escarnio de confesar un delito, porque ella lo que está diciendo al mentir es confesar un delito, y la están exponiendo a un riesgo en su salud , cuando había quedado acreditado que es extramadamente vulnerable».
Rozanski recordó que «esta niña fue abusada durante cuatro años, desde los seis a los diez, en Córdoba, por su padre biológico. Todo tipo de abusos. Cuando tuvo 14 años y pudo verbalizar lo que le estaba pasando, o le había pasado con su padre, se hizo una denuncia, se investigó en la justicia cordobesa y finalmente se corroboró todo lo que había relatado esta niña a través de pericias que confirmaron -no sólo que el relato era veraz- sino que se le había producido un grave daño en la salud mental. Así se llegó a una sentencia en 2023 contra el padre como autor de los delitos de abuso sexual gravemente ultrajante, triplemente calificado por el grave daño en la salud mental de la víctima, por el vínculo y la situación de convivencia preexistente».
El relato que leyó la joven (cuyo nombre no se reproduce para preservarla) tuvo alto impacto en las redes sociales que la ubicaron como víctima de insultos y críticas. No hay mayores detalles sobre el acompañamiento -o no- que recibe luego de semejante exposición pública.
En noviembre el ministro de justicia había respaldado el proyecto de Losada al decir que “se creó una concepción hipócrita de que la mujer no miente”. Los especialistas destacan que la existencia de denuncias falsas son ínfimas, aunque el vaciamiento de los organismos que acompañan a las víctimas de abuso, trata, y violencia de género, y el posicionamiento del oficialismo con respecto a este tema, desalientan a las víctimas a la hora de pedir ayuda y realizar una denuncia.