La Libertad Avanza tiene sólo 39 diputados en su bloque. La votación que respaldó el veto presidencial al financiamiento universitario cerró con 160 votos afirmativos, 84 en negativos y 5 abstenciones. Es decir, el plan motosierra vuelve a encontrar aliados en el macrismo, en el peronismo, y en las provincias.
El oficialismo se movió para dar vuelta voluntades y garantizarse algunos faltazos, así construyó una victoria en la cámara baja que no admite festejos, por estas horas se multiplican las tomas de universidades y se evalúa el costo político de la medida.
El bloque del PRO le concedió 35 de sus 38 voluntades. Vistos los resultados la negociación Macri-Santiago Caputo resultó un éxito.. Ausente con aviso el diputado Héctor Stéfani, y los votos a favor del financiamiento por parte de los larretistas Álvaro González y Héctor Baldassi fueron los únicos cabos sueltos.
Por otro lado el gobernador de Chubut –Ignacio Torres- en sintonía con su jefe político aportó a la causa libertaria con el voto de la legisladora Clara Romero (que en el tratamiento del veto a jubilados se había ausentado).
Los radicales Mariano Campero, Martín Arjol, José Tournier y Luis Picat no se pusieron colorados por votar en contra de la actualización de fondos para las universidades, mientras que Pablo Cervi decidió colaborar con su abstención. Las sanciones aplicadas por el Tribunal de Ética de ese partido a los “héroes” que ajustaron jubilados no tuvo efecto aleccionador. Un detalle no menor: Arjol, Tournier y Cervi habían acompañado la ley de financiamiento universitario en septiembre. ¿Qué los habrá hecho cambiar de opinión?
Los misioneros del bloque Innovación Federal decidieron abstenerse: Alberto Arrúa, Yamila Ruiz , Daniel Vancsik y Carlos Fernández, todos ellos en septiembre votaron a favor de la ley.
El tucumano (¿peronista?) Osvaldo Jaldo aportó tres voluntades: Gladys Medina, Agustín Fernández y Elia Fernández. Otro peronista, en este caso gobernador de Catamarca, Raúl Jalil, aportó una ausencia, la de la diputada Fernanda Ávila.
Las ausencias en esta sesión se leen en clave, ya que se necesitaban dos tercios de los presentes para sostener la ley. Pegaron el faltazo también Alejandra Torres por Córdoba (adujo estar cursando un cuadro de COVID) y Jorge Ávila quien además de diputado es Secretario General del Sindicato del Petróleo y Gas Privado del Chubut (de buen vínculo con el gobernador Torres).
Yolanda Vega, que responde al gobernador de Salta Gustavo Sáenz no esuvo en el recinto y Jose Luis Garrido, de Santa Cruz, le dio una mano al presidente dando vuelta su voto.